Historias/Lugares de Pesca
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Todavia no me agarró la fiebre…

Ante la insistencia de un amigo, acepté acompañarlo a pescar la boca del río Chimehuin, la cual es famosa por la fiebre que provoca en los pescadores que terminan enamorándose de ella. Seguramente por mí falta de experiencia en éstos lugares, todavía realmente no me atrae la pesca que ahí se practica, es más, de a momentos me hizo recordar a los pescadores enredando sus lineas en la costanera del Río de la Plata en Bs.As. Mucha gente, todos haciendo lo mismo, con equipos grandes, moscas grandes, todo un ritual al que no estoy acostumbrado.

Llegamos relativamente temprano, un día frío, gris, pero sin viento, según dicen no son las mejores condiciones de pesca que pueden darse allí, preparamos equipos y nos separamos, mi amigo pescaria la boca y yo me iría rio abajo un km mínimo, para buscar los lugares solitarios y con otro tipo de aguas, aquellos sitios donde me siento más cómodo pescando y en donde me permite conectar mejor con la naturaleza, que es lo que busco cada vez que salgo a pescar…

La mañana transcurrió normalmente, por mí lado algunas truchitas chicas que me fueron suficientes para divertirme con mí equipo #3 y las pequeñas moscas que mojé ese día. Luego del almuerzo, el cual habíamos coordinado previamente para encontrarnos cerca del puente de la ruta a las 14:00 hs, decidimos volver a intentar nuestras pescas, yo hice el mismo recorrido, pero ésta vez por la orilla opuesta, ya que quería probar otros sectores del río, mismo resultado. A la tardecita cuando volvimos a encontrarnos, casi no quedaban pescadores, la cosa estaba más “calma” y ahí sí me animé a probar unos tiritos en la famosa “boca”… tuve la suerte de pinchar una arcoiris chica mientras trataba de sacar una mosca de la campera de mí amigo, y no mucho más que eso…

En un momento escucho el grito característico… “EEEEEEEEEEEEEEEEEESSSSSSSSAAAAAAAAAAAAAAAAAA” mí amigo había pinchado algo interesante, ya que su caña se doblaba particularmente indicando que el pescado que estaba del otro lado de la línea, era importante, lo veía vadear entre las piedras, tratando de que aquel animalito no se soltase y tampoco rompiese el leader… era su momento!!! Asi que sólo atiné a observar, ver como peleaba esa trucha y cuando finalmente la tuvo entre sus manos, corrí por el puente hasta la otra orilla y cámara en mano, hice las fotos de rigor, una hermosa marrón de unos 3.5kg aproximadamente que había sido engañada y tentada por un anzuelo lleno de plumas… Todo era emoción!

Ese día comprendí a que se referían con la “fiebre de la boca”, aunque se que todavía no es mí momento, nunca digas nunca! Tal vez alguna vez me pique el bichito, por ahora, sólo soy un compañero de viaje y el fotógrafo de turno… 🙂

Marron del Chimehuin

Marrón del Chimehuin

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Atando Moscas/Historias/Lugares de Pesca/Naturaleza/planificar
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Pescando antes de salir de casa…

Domingo, lluvioso y temprano, decidí salir a desayunar frente al lago, mientras estaba ahí y miraba el agua, comencé a pescar, en mi mente ya estaba planificando la salida y me aísle del mundo, no se cuanto tiempo paso, pero definitivamente estaba yendo a pescar, a pesar de que me encontraba sentado en una silla entre cuatro paredes y tomando mi desayuno, me fui con el pensamiento…

comencé a imaginar como sería filmar un video de una salida de las que habitualmente hago en tiempo real, pero con un agregado que había hecho tan sólo un par de veces… La idea era llevar la morsa y todos los elementos de atado, atar una mosca seca, y tentar alguna pequeña fonti, todo filmado a dos cámaras e ir alternando luego en la edición…

Apenas volví en si, terminé de desayunar y obviamente armé todo el equipo tal cual lo había imaginado, y salí rumbo al arroyo. Llegué al lugar, el día era gris, lluvioso y frío, nada había cambiado en este sentido, en realidad el clima estaba empeorando, pero a mí me encantan los días así, creo que se crea un clima especial en la montaña que permite conectar mejor con la naturaleza que nos rodea. Obviamente no había nadie, pensé inmediatamente: mejor para mi…

Una vez instaladas las cámaras y ordenado un poco mi improvisado banco de atado, presioné rec y comencé a atar la mosquita, por momentos me olvidaba que estaba filmando y de a ratos, me preocupaba por ello, tienen baterías las cámaras ? el foco estará bien ? después de todo sentía que ya lo había hecho en la mesa de desayuno de ese domingo y como me habia gustado tanto la idea, queria que nada saliera mal. Fueron 15 minutos de filmación continua que luego edité en algunos minutos menos.

Todo resultó mejor de lo que lo esperaba, el clima alternaba entre sol, nubes y lluvia, además una perrita negra muy simpática se sumó al set de filmación aportando lo suyo, le dió un toque especial al video, y para mí estuvo buenísimo.

Ate la mosca, pesqué lindas fontinalis, jugué con la perrita, tome mi café y volví a casa a editar y publicar el video con mucha alegría.

El resultado ? bueno lo dejo aquí para que lo juzguen uds. mismos.

https://youtu.be/eB4133auNEw

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